53. (25 marzo 2010)

-Holaaaaaaa, mi niño. ¿Estás?.
-Helloooooo, preciosa. ¿Cómo no voy a estar?. Jajaja... Estoy conectado nada más que para llenarme el corazón de alegría cuando me escribes algo, y para poder decirte cuuuuuuaaaaanto te quiero y te amo, preciosa chica. Estás en lo más bonito de mi corazón, ahora mismo, y espero y quiero que sea para siempre.
-Yo quiero y deseo con toda mi alma estar en tu corazón siempre. Hoy estoy muy resfriada. He estado todo el día en la cama.
-Vaya, ya lo siento corazón.
-¿Cómo estás, Víctor?.
-Pues... habré pasado unas trescientas fotos aquí en Badoo, votando unas cuantas, a ver si aparecía una tuya para darle 30 o 40 puntos de golpe, pero nada, que no coincido con tus fotos, joeeeee...
-Claro, es que no he votado yo. Venga, va, voy a votar cincuenta fotos a ver si así me ves, jajajajaja...
-Pues tienes razón, Angela, ahora que lo dices.
-Víctor, hoy me he acordado muchísimo de ti. Un poquitirrinín más que ayer.
-A mi me ha pasado igual. Que me vienes a la mente durante el día, a mi pensamiento, y en esos momentos me entran unas ganas de abrazarte -aunque sea en la distancia lo imagino- y dejarte una sensación de amor y felicidad tan enormes, que no paro de sonreir. Eres mágica, Angela. Eres realmente mágica, de la mejor de las maneras posibles.
-Tú sí que eres mágico. Eres un chico impresionantemente especial, porque lo tienes todo, y lo digo en todos los sentidos. En una palabra, me encantas... TE QUIERO...
-Joer, Angela, que mi corazón pega unos botes im-pre-sio-nan-tes cuando me imagino todo el amor que quiero y deseo compartir contigo.
-Te quiero tanto, Víctor, que ya no se como decírtelo.
-Chica, yo te amo de una manera tan enorme, tan increíblemente enorme, que ya sólo puedo sentirlo y que lo sientas, porque las palabras, ufffff, no me llegan ni al bordillo de la acera. Se me quedan cortísimas.
-Mi niño, ya me lo estás dando. Yo lo siento así.
-Vamos a vivir muchos años aún con buena salud. Pero te prometo que si reencarnamos -jajaja-, en nuestra próxima vida te encontraré, pero veinticinco años antes, ¿ok?. ¡Prometido!.
-Jajajajaja, a ver si es verdad que nos encontramos. Eso sería estupendo, pero... ¿tu has pensado, que yo con 31 años y tu con 13, yo sería si estuviese contigo, una 'asaltacunas'?.
-Jajaja...
-Yo ya te digo, me refería más bien a que en la próxima vida, nos vamos también a enamorar, tu con 22 añitos, y yo con 19, por ejemplo.
-Ahhhhhh, vale también así.
-Para tener por delante ochenta años para conocernos, descubrirnos y vivir experiencias de amor, alegría y magia en la vida.
-Eso está muy bien. Yo se que en la otra vida, si existe, nos vamos a enamorar los dos como dos chiquillos, con ese amor tan limpio, tan inocente, tan sano, como dos adolescentes. Aunque yo ahora estoy casi casi de la misma forma, porque con mi edad, y lo de adolescente no me pega, estoy y me siento así más incluso que cuando tenía 15 años.
-Si. Estoy contigo 100% Angela. Amarte rejuvenece, y no solo el espíritu y como se siente uno, sino el cuerpo también. Eso puedo jurártelo, chica.
-En eso tienes razón. ¿Sabes una cosa?. Yo desde que te conozco, mi espíritu no te puedes hacer una idea de lo que se ha enriquecido, lo que ha crecido. Y eso te lo debo a ti, mi niño. Mil gracias...
-Guapa, bonita, preciosa, mujer femenina, atractiva, decidida, atrevida, pícara, divertida, alegre, soñadora, tierna, dulce, fuerte, ágil, amorosa, todo corazón... ¿sigo?. Jajajajaja...
-Uf, me estoy poniendo roja de tantas cosas bonitas.
-Todo mi ser desea amarte, Angela. Y mi corazón emocionarte y amarte también. Me lo dice mi corazón a cada segundo. Que sea listo. Que me deje llevar por mis sensaciones y sentimientos, y eso estoy haciendo. Y es algo maravilloso lo que siento, y lo que me llega de ti...
-Lo de antes lo voy a copiar en un papel, no veas como te sube la autoestima leer eso sobre una misma.
-Yo te escribiré algo en un papel. Algo solo, porque si tengo que escribirte con mi mano todo cuanto de amoroso deseo transmitirte, me van a denunciar los de Greenpeace por delito ecológico al gastar tantos miles de folios, jajajajaja...
-Tu dices de mi que te llega todo eso que me escribes. Pues imagínate lo que me llegas y transmites tu ahora mismo, mi corazón y mi espíritu están saltando de alegría, y estoy llenita de energía. Mi cara está llena de lágrimas, y cada lágrima que sale, te está dando las gracias por hacerme tan feliz, son lágrimas que salen desde el alma, Víctor. Que feliz que soy desde que te conozco.
-Si pudieras -que te aproximas y acercas mucho, lo se-, si pudieras por un instante sentir, como yo siento, la Alegría... Alegría no por mi, que la mía ya es mucha, sino que siento que mi corazón se derrite de amor al escribirte, Angela. Soy tan feliz porque lo que me hace estar así es tu felicidad.
-Ay, Víctor. Te leo y es como si estuviese flotando. El día que salté en la playa, lo hice con tu nombre en mi boca, y eso es lo que me impulsó a dar ese salto, ahí estabas tu y me ayudaste a ello. Sino no tiene explicación que me saliera así. Sonia vio ayer la foto, y me dice, mamá, pero como pudiste saltar así, y encima con las piernas tan rectas. Es increíble...
-Ahora mismo, Angela, te estoy enviando tal cantidad de amor, de cariño, de Alegría, que tengo todos los pelos de punta, los ojos emocionados, el corazón temblando de gozo, y una sonrisa que ya la quisiera cualquiera -menos tu, que en eso de sonreír me ganas-. Y vaya salto, con todo tu ser.
-Y lo le contesté a ella, es Víctor, que me está sujetando por las piernas. Y me contesta muy seria: estás loca -jajaja-.
-Jajajajaja...
-Y me dice después. ¿Sabes?. Tengo la mejor madre del mundo. Eres única. Y nos abrazamos un buen rato, pero no lloramos, no veas como reímos.
-Totalmente de acuerdo con Sonia. Dile que si, que eres única y estupenda.
-Mi niño, ahora mismo no veas como estoy. Tengo mi corazón tan lleno de toda la energía que tu me mandas, de todo el amor que me haces sentir, que... ufffff... esto no es normal.
-Es que yo no quiero que sea normaaaaaaaal, quiero que sea alucinaaaaaaanteeeeee, maravilloso, y mucho más.
-Esto si que es soñar. Y aunque sea despierta, es el sueño que yo siempre quise soñar.
-Siente más y más amor, Angela. Siente como todo el Amor de mi corazón y de mi Ser, inunda tu cuerpo, y todo lo que es tu vida, y la vuelven mucho mejor aún de lo que ya pueda ser y es. Quiero y deseo que vayas envuelta en una burbuja de Amor, de tanto que te doy, corazón. Amor por fuera, por dentro y alrededor tuyo.
-Este sueño, Víctor, es el mejor que jamás he tenido, porque deja de ser un sueño, para ser realidad, y así no tienes ningún miedo de despertar, y que después no lo recuerdes.
-Cierto.
-Ahora mismo te estoy viendo. Veo tu carita y la mía las dos juntas, sonriendo, y dios mío, cuanta felicidad reflejan las dos. Cuanta, cariño, cuantaaaaaaaaaaaaa...
-Me tienes emocionado, chica. Me tienes, te lo juro, temblando de emoción. Pero que pedazo de Alegría que siente mi corazón leyendo tus palabras.
-Te Quierooooooooooooo... Me estás dando tanto, tanto, que sale por cada poro de mi piel, Víctor, y aún queda suficiente dentro de mi alma y mi corazón... tengo tanto amor tuyo, que tengo una reserva de cien años, o más.
-¿Reserva de 100 años?. Poco es. Deseo darte y transmitirte muchísimo más amor, Angela. Quiero amarte, y te amo sin medida, sin límites, sin guardarme lo más mínimo, Angela. Casi no hay espacio suficiente en todo el planeta Tierra, para colocar todo el amor que quiero transmitirte y darte. Quiero que sientas la Alegría llenando tu corazón, saliendo por tu piel, quiero que sientas el Amor -si vas un segundo a tu espejito mágico lo verás, jajaja- reflejado en tu mirada, y en tus ojos, y en tu sonrisa...
-Victor, mi niño, tu no eres consciente de lo que me transmites, de lo que recibo de ti, de tanta riqueza que me das, de tanto amor que recibo de ti. Cada palabra que me escribes, llega dentro de mí con una energía tremenda.
-Yo he ido al espejo, para poder decir mirándome a los ojos: Gracias, Vida, porque has puesto a una mujer maravillosa que es Angela en mi vida. Gracias, corazón mío, porque me estás haciendo sentir que he conocido lo mejor, y que está en mi y en Angela. Gracias de corazón, Vida, porque me estás dando la posibilidad de hacer muy feliz a Angela, y así descubrir cuánto de feliz puede llegar a ser una persona cuando esa felicidad nace del corazón.
-Jajaja, como sigas mirándote así, el espejo te va a sacar la lengua divertido, de lo feliz que lo haces a él al ver tu sonrisa.
-Uffff, voy otra vez al espejo, a volver a dar gracias a la Vida por haberte conocido. No tardo nada, corazón.
-Yo también cada vez que me miro se las doy, Víctor. ¿Y sabes?. A veces hasta escribo gracias con mi barra de labios.
-Que bello, Angela.
-Guau, que maravilla, chico.
-Tenemos que hacernos algunas fotos, los dos, con una energía tan grande, tan positiva, tan impresionante, que solo de verlas ya sean como una terapia, que cure todos los males. Jajaja, eso estaría genial.
-Yo antes tenía escrito en mi perfil, Víctor, que me encanta sentarme en la orilla del mar, mirar al horizonte, y dejarme llevar. Y si. Lo vamos a conseguir, esa energía nuestra saldrá, ya lo verás.
-Seguro que si.
-El día que esté yo sentada a tu lado en la playa, solos los dos, y grite a la Vida lo que siento, lo que tu me transmites, será especial. Seguro que me derrito...
-Si. Yo quiero. Yo quierooooooooooooo...
-TE AMO, VÍCTOR. TE AMO...
-TE AMO, ANGELA. TE AMOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO...

52. (23 marzo 2010)

-Víctor, cariño, que te quiero un montón... Te amooooooooooo...


El porque la Vida nos hacía buscar siempre los sentimientos más intensos, las palabras más sublimes y el amor más dulce y precioso, ya no era un misterio para nosotros. Sentíamos que nos uníamos cada vez más, y que la emoción de estar juntos y compartir los dos las experiencias nos hacía estar cada vez más cerca, y más dentro uno del otro.


-Ayyyy, niño, me emocionas con lo que escribes. Y como tu has dicho antes, las lagrimitas, como salen.
-A este paso nos van a llamar para llenar los pantanos de Murcia, Alicante y Almería, de tantas lágrimas de emoción y alegría que nos van a acabar saliendo.
-Jajajajaja. Me vas a volver tonta del todo, paso del llanto a la carcajada que no veas. Lloro de emoción y alegría, y rio de felicidad.
-Eso es que la Vida está dentro de ti y no puedes pararla.


En este mundo de hoy día, de prisas y angustias. Donde las relaciones cada vez son más impersonales y frías. En sociedades y países que denigran y casi condenan a la burla y al desprecio a aquellas personas que se guían por nobles sentimientos, por un amor pasional y buscan lo bello y positivo en todo cuanto hacen y les sucede. Haciendo que las personas compitan, y vivan solo para trabajar y ganar el suficiente dinero para después de toda una vida no poder disfrutarlo como hubiesen querido. En el cual mentir y no ser como uno es ante las personas que nos importan es moneda común entre la gente.


En este mundo, todavía quedan personas que vibran con el amor. Que lo expresan con todo su corazón y su ser. Personas que valoran más lo que son y lo que sienten, y como lo viven y expresan, que lo que tienen, acumulan y aparentan ante los demás. Personas que sin renunciar a su calidad de vida disfrutan de la alegría de sentirse vivos, y dan gracias cada día por el amor de pareja que tienen el privilegio de compartir y vivir.


Y en esa categoría de personas, entramos Angela y yo.


-¿Tienes monedas de 12 euros?
-Que va, chica. Tengo unos billetes de 70 euros.
-Jajaja, de esos no quiero.
-Bueno, te puedo dar dos de 35, si lo prefieres así.
-En serio te lo digo, Víctor. De 12 euros y de 2000 pesetas, en moneda.
-Esas son de las que se compra uno para coleccionar y guardar.
-Claro. Se puede pagar con ellas, pero no merece la pena.
-Un hombre me dió un dólar, un inglés, fíjate que yo no estaba por las tardes, y ese día si. Era de colección. Y me dijo: yo no tengo hijos a quien dárselo, y te lo doy a ti, porque te lo mereces. Esto fue un viernes, y me enteré el lunes que había fallecido.
-Uf, que impresión, ¿no?
-Si.
-A veces las cosas suceden porque algo las empuja a suceder así, como si tuviesen una finalidad.
-El próximo día te voy a contar una cosa que me ocurrió el 24 de mayo.
-Claro que si, estoy deseando oirla...
-Además tiene que ver con el número 11, y tu fecha de nacimiento.




Que deciros que no sepáis ya, a estas alturas de nuestra historia. Pues podría decir contar mucho más, aunque el espacio de este relato entonces se volvería interminable. Y eso es algo maravilloso. El solo pensar que cada día que pasa tenemos más para contar, más para expresar, y más amor que compartir.


Acaricio entre mis manos la fina cadena que tengo en mi cuello. Al tocarla, algo muy profundo llega a mi mente y a mi corazón. Hay detalles y regalos, que son tan emotivos, y llevan en si mismos tanta carga de amor y de sentimientos, que el simple roce los vuelve mágicos. Angela, con todo su corazón, me regaló un momento especial, de esos que siempre permanecen en el recuerdo frescos y vivos.


Los momentos que esta chica regala son de una calidad insuperable, al menos tal y como yo los siento. Incluso al pensar en estas palabras que escribo para describir estos momentos, el corazón vuelve a vibrar con más fuerza, mi pecho suspira de alegría, mis manos se deslizan suavemente sobre el teclado haciendo un rítmico tac-tac-tac mientras me abro a mostrar mis sentimientos. Sentimientos que se multiplican cada día que vivimos juntos.


Y es que la Vida sabe muy bien lo que se hace. Nos podrá parecer que todo es fruto de los encuentros y la casualidad. Yo os digo sin dudar, que hay personas que estamos hechas unas para otras, para encontrarnos en la vida y vivirla juntos. Que existen las almas gemelas, entendidas como dos seres que uno y el otro juntos son armonía en estado puro. Como nos sucede a Angela y a mi, que da igual lo que nos suceda, o donde estemos, la conexión se produce, suceden cosas inexplicables a la vez que maravillosas, que nos hacen tomar conciencia de a que nivel de relación hemos llegado, y lo que es más bonito aún, a que nivel podemos llegar si seguimos proponiéndonos ir hacia adelante -siempre hacia adelante- en nuestra relación y nuestro amor.


-Venga, corazón inquieto, niña preciosa, ángel del cielo... ¡Dulces sueños, princesa!.
-Venga, mi niño, descansa. TE AMO...
-TE AMO, Angela...